El marketing tradicional ha sido un pilar en el mundo empresarial durante décadas, pero en la era digital, combinarlo con el marketing en línea es esencial para maximizar el impacto y el alcance de tu empresa.
Acompáñanos a explorar las estrategias de marketing digital que pueden complementar y potenciar las estrategias de ventas tradicionales, brindándote ejemplos concretos para tu empresa pueda prosperar en este entorno tan competitivo.
Comprender el Marketing Tradicional
Antes de comenzar, es esencial entender qué implica el marketing tradicional. Esto incluye estrategias como publicidad impresa, radio, televisión y marketing directo. Estas tácticas han sido efectivas durante años y siguen siendo valiosas para muchas empresas.
Pero… ¿Cómo podemos complementarlo con las estrategias más disruptivas que han aparecido en los últimos años?
El marketing digital abarca un amplio espectro, desde redes sociales hasta la publicidad en línea (ads) y el email marketing.
Veamos algunos ejemplos de como crear una estrategia integrada entre lo más tradicional y las últimas tendencias de marketing digital.
Estrategia integrada: Marketing tradicional con marketing digital
La clave de este tipo de estrategia es aprovechar lo mejor de ambos mundos para lograr un enfoque cohesivo y efectivo que aplique el alcance de una empresa. Algunos de los elementos clave son:
- Comprender los canales y la audiencia. El marketing tradicional tiene un público más amplio, mientras que el digital es conocido por su segmentación. Asegúrate de saber a quiénes te estas dirigiendo en cada canal.
- La consistencia del mensaje. La identidad sólida es vital, mantén un mensaje coherente en ambas ramas.
- Sinergia entre campañas. Diseña campañas que se complementen entre sí. Por ejemplo, una campaña en medios tradicionales puede dirigir a las personas a interactuar en línea, como visitar tu sitio web o seguirte en redes sociales.
- Medición y análisis de datos. Esto te permitirá ajustar y optimizar continuamente tus estrategias.
- Estrategia Multicanal. No se trata de elegir uno u otro, sino de utilizarlos en conjunto de manera estratégica. Por ejemplo, una empresa puede usar anuncios de televisión para crear conciencia y luego dirigir a las personas a un sitio web para obtener más información o realizar una compra.
- Flexibilidad y adaptación. El entorno digital cambia rápidamente. Una estrategia integrada debe ser flexible y capaz de adaptarse a las tendencias emergentes y los cambios en el comportamiento del consumidor
- Colaboración interna. En el caso de tener el departamento dividido, es esencial que haya una comunicación abierta y con los objetivos bien alineados.
Dicho esto, veamos algunos ejemplos en redes sociales, email marketing y publicidad.
Las Redes Sociales como herramienta para conectar con los clientes
Un ejemplo concreto de cómo las redes sociales pueden ser una herramienta poderosa para conectar con clientes existentes y potenciales es a través de la interacción y el compromiso constante con los usuarios en estas plataformas.
Imagina que eres el propietario de una tienda de moda en línea y deseas fortalecer las relaciones con tus clientes actuales y atraer a nuevos compradores. ¿Qué deberemos hacer?
Paso 1. Regularidad en las publicaciones.
Paso 2. Generación de respuestas y comentarios personalizados.
Paso 3. Historias y transmisiones en vivo.
Paso 4. Colaboraciones con influencers.
Paso 5. Publicidad dirigida.
Paso 6. Medición y análisis.
En conjunto, estas estrategias permiten que las redes sociales sean una herramienta poderosa para mantener a los clientes existentes comprometidos y atraer a nuevos compradores interesados en tus productos de moda. La interacción activa y el contenido relevante son fundamentales para construir y mantener relaciones sólidas con la audiencia.
El email marketing complementa a tu estrategia de marketing tradicional.
El email marketing atrae a nuevos clientes mediante ofertas atractivas, captura su atención con contenido relevante y personalizado, y retiene su lealtad a través de una comunicación continua y valiosa. Esta estrategia puede ser altamente efectiva para fomentar la conversión y la retención de clientes.
Veamos un ejemplo para cada etapa del embudo de ventas.
Atracción: Supongamos que tienes una tienda en línea de productos para el cuidado de la piel. Para atraer a nuevos clientes, puedes ofrecer un «Descuento de Bienvenida» del 15% en su primera compra a aquellos que se suscriban a tu boletín de noticias a través de tu sitio web. Este descuento es una fuerte motivación para que los visitantes se conviertan en suscriptores.
Captación: Una vez que los visitantes se suscriben, comienzas a enviar correos electrónicos estratégicos. Por ejemplo, puedes enviar un correo de bienvenida personalizado que incluya no solo el descuento, sino también información sobre los beneficios de tus productos y una invitación a explorar tu tienda en línea. También puedes segmentar a tus suscriptores según sus preferencias de cuidado de la piel, lo que te permite enviar contenido específico que les interese.
Retención: Para retener a los clientes, implementas una estrategia de correo electrónico continua. Esto incluye:
- Envío de correos electrónicos regulares con consejos de cuidado de la piel y contenido educativo relacionado con tus productos.
- Ofrecer descuentos exclusivos para clientes leales o ventas especiales para festividades.
- Solicitar opiniones y comentarios de productos después de una compra para mejorar la experiencia del cliente.
- Mantener a los clientes informados sobre nuevos productos y actualizaciones de inventario
Publicidad en línea como elemento de una estrategia integradora de marketing.
El ejemplo más claro para emplear la publicidad en este tipo de estrategias es la publicidad omnicanal. Vamos con el ejemplo:
Supongamos que tienes una cadena de tiendas de ropa y deseas promocionar tu nueva colección de primavera.
Marketing Tradicional:
Realizas una campaña de carteles y vallas publicitarias en ubicaciones estratégicas de la ciudad.
Distribuyes folletos promocionales en tu tienda física para informar a los clientes sobre la nueva colección.
Organizas un desfile de moda en tu tienda principal para atraer a clientes locales y generar cobertura mediática.
Marketing Digital:
Creas anuncios en redes sociales como Facebook e Instagram para mostrar la nueva colección a tu audiencia en línea.
Diseñas una campaña de correo electrónico que se envía a tu lista de suscriptores con imágenes de la colección y un enlace directo a tu tienda en línea.
Implementas anuncios de búsqueda en Google para que cuando las personas busquen «ropa de primavera», tu tienda aparezca en los resultados.
Integración:
Utilizas códigos QR en los carteles y folletos impresos que dirigen a los clientes a la página de destino en línea de la nueva colección.
Promocionas el desfile de moda en tus redes sociales y lo transmites en vivo para llegar a una audiencia en línea más amplia.
Realizas seguimiento de las conversiones tanto en la tienda física como en línea para evaluar el rendimiento de la campaña.
Ahora te toca a ti, todos los ejemplos que te hemos ido aportando puedes extrapolarlos a tu sector. Recuerda que lo más importante a la hora de aplicar una estrategia es tener claro los objetivos, el target al que te diriges y cuáles serán las métricas que vas a medir.
Si necesitas ayuda para establecer tu estrategia, siempre recomendamos que contactes con profesionales del sector, puedes contactar con nosotros y contarnos tus objetivos sin ningún tipo de compromiso.
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